Si hombre por unos segundos pudiera yo sersus misterios y porqués escudriñaríaSu naturaleza impredecible querría entender,y su temor a la soledad comprenderíaSi hombre por unos instantes fueraDe su estoicismo ante el dolor sabríasu llanto oculto descifrar quisieramucho de él, si hombre fuera, entendería.Si hombre por un segundo, Dios me permitiera serCuanto sabría de la verdad de su fidelidad y su ternuraDe la firmeza y dimensión de su amor, podría saberDe sus deseos, sus afanes, de su alma de niño, sus locuras.Si hombre por un minuto… por un instante, hubiera sidoTantas respuestas al porqué de su existencia, habría logradoSabría de su temor ante el dolor más nimio percibidoTemor que incita a creer que a su vida, la súbita muerte ha llegado.Mas soy mujer…ser que ama y valorar sabe a un hombre en su verdadque en su esencia impredecible se goza y se liberaque de ternura y de pasión ante él se colma plena.Soy quien ama al hombre y al niño que en él se perpetúael que busca la protección y de unos brazos el cobijoaquel que se muestra ante la vida incólume y bizarroMujer soy... y mas quisiera conocertepara fundirme en ti hasta saber cuánto te amoAmy/ marzo 26 - 2006
Y un ángel vino a mí esa mañana y me cobijó, como sólo se abrigan a los seres desvalidos... desprotegidos, a quienes no se les ha valorado el alma. Ven a mí - deciale la playa a aquella efímera olaque su senda no posponía.- Rompe tu curso y acorrálame en tus sudadas entrañasdevórame con ansias finas y sacude mi arena en frenesí constante -Mas la ola sin turbarseazotaba rauda las saladas aguas,sin salpicar siquiera las caracolas de coloresque ornaban la blancura infinita,playa infinita y eterna dueñade las huellas indelebles y profundas.- Ven a enamorar mi rada… ven a enajenar mi orillaVen a cubrir con tu aliento la cálida brisaque levanta en briznas mi arena –en eco azul, clamaba la enamorada playa.Y en sutil murmullo aquella arena blanca,su monólogo proseguía:- Cautiva con tu susurrante voz mi alfombrada inmensidady permite que mi calidez te abrase y te alimente.Y en oleaje travieso, la muda e indiferente ola correteabay en la indiferencia se sumía.- Sé mi aliada… mi indulgente amiga,Se mi éxtasis, mi horizonte y mi arrebato;Advertencia y luz de mi acalorada piel.Ven yaque la incipiente y sorprendida noche nos atrapaen su crepúsculo vespertino acostumbrado.- Ven y propicia el desvelo en mis nochesy cuando arribe la mañanaque sólo florece en primavera,permite que seamos dos alimentando el día –Ven a mí – cantaba ya aquella playa.Y mientras… la efímera ola hacia la mar se iba.Amy / marzo 2006
En mis días azulesensueños de verdes esperanzasen medio de la brumaen medio de la niebla que azotay trae el desasosiego.En mis días azules,versos sutiles que palpan los labios de fresalos labios de rosaque se gozan en un osculo sagrado tuyo,bajo un cielo azulque se enamora de la mar.En mis días azulestú y sólo tú,savia del alma mía,laurel que anhelo en mis triunfos,solaz eterno de mis días.En mis días azulesreverdece y se erige el amorrenacen los recuerdos,y te reproduces y vives túen mí.Amy/marzo de 2006